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A Tiger Woods y a otros miles de hombres les han descubierto sus escarceos amorosos gracias a las pistas que dejaron en sus teléfonos móviles, verdaderos repositorios de la historia de un hombre (en genérico: también de una mujer). Una aplicación para el iPhone (próximamente también para Android y Blackberry), adecuadamente llamada TigerText*, permite al usuario determinar el período de vida de un mensaje o una cadena de mensajes enviada por una persona, a la que llamaremos “la otra”.TigerText también protege contra el propio destinatario porque en realidad el mensaje sólo es visible en su terminal pero, al contrario que un SMS normal, no está físicamente en él. Por tanto, el remitente sigue teniendo el control sobre el mismo una vez enviado.
Una vez que ha transcurrido el período de tiempo asignado -una hora, un día, una semana- la aplicación borra el mensaje de los teléfonos del remitente y del destinatario,haciendo imposible su almacenamiento, reenvío o “la venta a los tabloides”, como cínicamente señala el diario The Times.
También existe una posibilidad de cuenta atrás y borrado, el equivalente a “este mensaje se autodestruirá en 10, 9, 8…” de las antiguas películas de espías. La cuenta atrás de un minuto se inicia en el momento en que se abre el mensaje y cuando llega a su fin, éste ha sido borrado. Para los extra-paraonicos existe una opción que borra también todas las llamadas realizadas y recibidas desde el número en cuestión.
Página del desarrollador.
Precio: La aplicación cuesta 1′5 dólares por 100 mensajes y 2′5 dólares al mes para un número ilimitado de mensajes. De momento está disponible en EEUU, aunque este mes también lo hará en Reino Unido.
Posibilidades de éxito: Desdichadamente elevadas. Además de ocultar los escarceos tendrá mucha salidas para, por ejemplo, dar instrucciones para un atentado terrorista.
Visto en Times Online.
* Los creadores juran y perjuran que el nombre de Tiger lo escogieron porque el tigre es un animal difícil de seguir. Además, y “fortuitamente”, el lanzamiento coincidió con el inicio del Año del Tigre en el calendario chino. Ninguna mención al golfista golfo.
