Investigadores del Lawrence Livermore National Laboratory ha presentado un dispositivo de tres pulgadas que puede detectar hasta 3.000 tipos diferentes de virus y bacterias en sólo 24 horas. El bio-detector, llamado Lawrence Livermore Microbial Detection Array (LLMDA), podría tener enormes implicaciones en ataques biológicos y químicos, seguridad alimentaria o farmacéutica y en el diagnóstico de problemas médicos.
El dispositivo, desarrollado entre octubre de 2007 y febrero de 2008, no es más que una escala deslizante de cristal que podría pasar por un porta-muestras normal Pero más allá de ese pequeño objeto de vidrio se asientan, en un patrón de tablero de ajedrez, 388.000 sondas para buscar más de 2.000 tipos de virus y 900 tipos de bacterias.
Los científicos secuenciaron cada tipo de virus y bacteria y luego desarrollaron docenas de sondas para identificar cada secuencia. LLMDA es tan potente que ofrece beneficios significativos sobre la bio-detectores actuales, basados en la detección por polimerasa, que sólo pueden identificar alrededor de 50 agentes patógenos a la vez.
El proceso requiere una muestra purificada de ADN o ARN, que está marcado con un tinte fluorescente. Luego se aplican en todo el LLMDA y se calienta a 42ºC. Un escáner simplemente echa un vistazo y cuando las sondas han encontrado una coincidencia secuencial las ilumina, dando paso a un software de análisis de fluorescencia para determinar la presencia de patrones virales o bacterianos.
Desde un punto de vista de seguridad, el LLMDA podría ser un mecanismo de análisis que salvara muchas vidas, especialmente en el caso de un sofisticado ataque biológico o químico en el que se activa al mismo tiempo más de un agente sobre la población. Pero también tiene la misma efectividad si se emplea para la vida civil.
Se podría mejorar la seguridad de los productos alimentarios, crear mecanismos agrónomos para ayudar a controlar los patógenos de plantas, o rápidamente, diagnosticar un problema médico sin necesidad de pasarse días pensando en el despacho del Dr. House.
Por ejemplo, el LLMDA en su estreno ya ha descubierto un virus de cerdo que estaba presente en una vacuna infantil de la farmacéutica GlaxoSmithKline, Rotarix, que se utiliza para prevenir la diarrea en los bebé. El virus resultó ser inofensivo, pero ha demostrado lo revolucionario de este método de detección temprano.
Y quizás lo mejor de todo: el LLMDA es completamente actualizable. El equipo de Livermore ya está trabajando en un detector de nueva generación que contiene 2,1 millones sondas para escanear en busca de todos los virus conocidos. El nuevo detector también añadirá hongos y protozoos a la lista de mini-asesinos que analiza.
Para cada bacteria o virus que ha sido descubierto en cualquier parte del mundo, la sonda incorpora varias decenas de cuadrados en el tablero que permitirá identificar las distintas mutaciones de ese organismo, dando como resultado 178.000 secuencias virales de unos 5.700 virus y cerca de 785.000 secuencias bacterianas de otras tantas bacterias.
y2a -Fuente Science daily