El Windows Phone 7 es expuesto durante su presentación a los medios (EFE).
El pasado lunes aparecía en escena el último, hasta la fecha, sistema operativo móvil del mercado, a falta de ver si Nokia renueva Symbian o HP pone en valor su reciente adquisición de Palm. Microsoft presentó Windows Phone 7, la evolución de Windows Mobile con la que aspira a recuperar el protagonismo perdido y que hoy acaparan Apple, Google, RIM y, en menor medida, Nokia.
La pregunta del millón debatida en múltiples foros de Internet es si será capaz de conseguirlo. Argumentos que auguran su fracaso no faltan.
Pero, aunque Windows Phone 7 tiene sus debilidades, también tiene grandes fortalezas sobre las cuales pasamos a reflexionar.
La pregunta del millón debatida en múltiples foros de Internet es si será capaz de conseguirlo. Argumentos que auguran su fracaso no faltan.
Pero, aunque Windows Phone 7 tiene sus debilidades, también tiene grandes fortalezas sobre las cuales pasamos a reflexionar.
• Llega tarde y de los últimos. Puede parecer paradójico que suponga una ventaja competitiva, pero lo es, en la medida que les permite copiar lo bueno de los demás y evitar lo malo. Los estudios de mercado ya se los ha hecho la competencia.
• Es Windows. Otra paradoja teniendo en cuenta la, en ocasiones, dudosa reputación de su sistema operativo para ordenadores de sobremesa. Pero, pensemos por un momento en una de las claves del éxito de uno de sus rivales, el iPhone, basada en su integración con el ecosistema Mac.
En Apple todo funciona de forma sincronizada: ordenador, móvil, iPad, iPod, etc. Para un usuario de Mac esto es algo fundamental. Los usuarios de Windows que tienen un iPod o iPhone siempre carecen de esta pieza básica como es la armonía de toda su electrónica de consumo en torno a una plataforma común.
Si Microsoft consigue armar un entorno Windows en el que vivan de forma ordenada el ordenador personal, el móvil, Zune, Xbox, etc. subirán un escalón en la experiencia de usuario donde, exceptuando Apple, su competencia tiene difícil llegar.
En Apple todo funciona de forma sincronizada: ordenador, móvil, iPad, iPod, etc. Para un usuario de Mac esto es algo fundamental. Los usuarios de Windows que tienen un iPod o iPhone siempre carecen de esta pieza básica como es la armonía de toda su electrónica de consumo en torno a una plataforma común.
Si Microsoft consigue armar un entorno Windows en el que vivan de forma ordenada el ordenador personal, el móvil, Zune, Xbox, etc. subirán un escalón en la experiencia de usuario donde, exceptuando Apple, su competencia tiene difícil llegar.
• Office. Es la suite ofimática líder. La pregunta más habitual de los usuarios que se plantean pasarse a Apple o Android es si éstos tienen compatibilidad con Office.
Es una barrera de salida muy importante sobre todo en el ámbito profesional. ¿Quién mejor para integrarla en un smart phone garantizando su compatibilidad con la versión de escritorio que la propia Microsoft?.
Es una barrera de salida muy importante sobre todo en el ámbito profesional. ¿Quién mejor para integrarla en un smart phone garantizando su compatibilidad con la versión de escritorio que la propia Microsoft?.
• Es Microsoft. La compañía de Redmond se caracteriza por haber protagonizado asaltos a nuevos mercados que, a pesar de fracasos iniciales, han culminado con éxito. Hagamos memoria. Xbox nacía en pleno dominio de Sony y Nintendo.
Su primera aproximación tuvo poco tirón, pero la segunda, con Xbox 360, los ha situado como uno de los líderes del sector de los videojuegos. El propio precursor de Windows Phone 7 es otro ejemplo. Microsoft puso en marcha Windows CE en un momento en el que Palm era el absoluto dominador del mundo de las agendas electrónicas. Versión a versión fue machacando a Palm hasta hacerla desaparecer del mapa.
Su primera aproximación tuvo poco tirón, pero la segunda, con Xbox 360, los ha situado como uno de los líderes del sector de los videojuegos. El propio precursor de Windows Phone 7 es otro ejemplo. Microsoft puso en marcha Windows CE en un momento en el que Palm era el absoluto dominador del mundo de las agendas electrónicas. Versión a versión fue machacando a Palm hasta hacerla desaparecer del mapa.
• La competencia. En mi opinión realmente sólo se enfrenta, a día de hoy, a un competidor: Google. Apple no lo es, entre comillas, porque está en otra guerra. No parece interesada en tener la mayores ventas y de ahí que sólo tenga un modelo de móvil en su catálogo.
Así que no la veo compitiendo por un punto de cuota como si le fuera la vida en ello. Nokia lo es más por lo que pueda hacer que por lo que ahora tiene. HP con su PalmOS está por venir y es una incógnita. Solamente queda Android, que ha ocupado el tremendo agujero que la irrupción de Apple ha originado.
Apple revoluciono el concepto de smart phone, creando una necesidad, pero sin ocupar todo el espectro del mercado originado por ella. Google llegó y lo ocupó, en gran medida, por la ausencia de alternativas.
Así que no la veo compitiendo por un punto de cuota como si le fuera la vida en ello. Nokia lo es más por lo que pueda hacer que por lo que ahora tiene. HP con su PalmOS está por venir y es una incógnita. Solamente queda Android, que ha ocupado el tremendo agujero que la irrupción de Apple ha originado.
Apple revoluciono el concepto de smart phone, creando una necesidad, pero sin ocupar todo el espectro del mercado originado por ella. Google llegó y lo ocupó, en gran medida, por la ausencia de alternativas.
Concluyo. Si Microsoft integra correctamente Windows Phone 7 con el resto de sus productos y consigue el favor de los desarrolladores de aplicaciones tendrá el éxito prácticamente asegurado. Si no, hará algo a lo que esta acostumbrada; lo intentará de nuevo hasta tenerlo. Músculo y tesón no le faltan.